Tiempo de renovar

Un poderoso pincel, movido por una fuerza invisible e innovadora crea un ser que camina en uno de los planos que componen la pieza. Ese camino lo llevará a experimentar dolor, alegría, satisfacción y tal vez fracaso, pero siempre con una meta única: alcanzar el plano superior, el plano de la luz, el plano de lo divino.

Con colores cálidos y trazos poderosos, Mercedes Arellano, inspira al crecimiento y empoderamiento de uno mismo. Los universos que rodean el alma, permiten que ésta trascienda y permanezca para siempre en forma de energía perpetua, como reflejo de la mano del creador mismo que es dueño del pincel que todo dibuja.

Esta obra figurativa, nos invita a la reflexión sobre nuestra propia vida. "Tiempo de Renovar", indica cómo podemos elegir el camino de los retos, de la incomodidad, del crecimiento para, eventualmente, trascender hacia lo divino; o bien, elegir el camino de lo fácil, lo cómodo, lo oscuro que nos impedirá alcanzar esa transcendencia para la cual deberíamos haber nacido.

Este mensaje, se corona con el símbolo más poderoso de esta pintura: una cruz de luz que representa las penas, los dolores, los retos, padecimientos y sufrimientos a los que cada persona se puede enfrentar en su vida, pero que, cuando son superados, asimilados, aceptados, favorecen la grandeza del espíritu y permiten que la persona transcienda y se convierta en la luz misma que representa esa ascensión.

El pincel nos crea, nos dota de un cuerpo y un alma, nos otorga los retos a vencer y nos invita a caminar por el sendero de lo superior. Sólo es necesario escuchar y aceptar los desafíos para, entonces, valientemente alcanzar lo divino y dejar de ser simples personas para convertirnos en luz.

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